En nuestra excursión por el interior de la provincia de A Coruña y por el afán de descubrir pueblitos nos desplazamos hasta Arzúa (famosa por sus quesos) para ver la espectacular Fervenza das Hortas o Fervenza de Santa Marta, una de las más altas y bonitas de Galicia.
Esta cascada de más de 25 metros de altura está formada por el arroyo Regueiro de Saímes que separa los municipios de Touro y Arzúa un poco antes de su desembocadura en el río Ulla.
Si continuamos río abajo encontraremos otro pequeño salto de agua y un molino harinero que fue escenario de la leyenda que rodea este lugar (no seáis ansiosos que os la cuento más abajo😅)
Como llegar
Para llegar hasta la cascada deberemos dejar el coche en el lugar de As Hortas en Arzúa y continuar andando.
Está bastante señalizada desde la carretera CP-0605 así que no tendréis pérdida. Una vez paséis el pueblo de As Hortas veréis una pequeña zona de aparcamiento de tierra y desde ahí deberéis descender unos 400 metros. El sendero está muy bien acondicionado con escaleras de madera.
También hay acceso habilitado desde el municipio de Touro pero a mí personalmente me parece más sencillo y bonito desde la parte de Arzúa.
Leyenda de la Fervenza de Santa Marta
De la fuerza de estas aguas se nutría un molino donde una joven iba cada mañana a elaborar un delicioso pan.
Rebosaba de felicidad cuando se enteró que estaba embarazada, lo que nunca pensó es que su amado novio la iba a rechazar.
Tras una fuerte discusión el hombre (por no llamarlo de otra manera) la arrojó desde lo alto de la cascada con la intención de acabar con su vida. Mientras caía, la joven gritaba implorando a Santa Marta que la salvara con la grandísima suerte de que un roble amortiguó su caída haciendo que sobreviviera.
Desde ahí se conoce también a esta cascada como Fervenza de Santa Marta.
Y aprovechando que estáis por la zona, a solo 25 minutos tenéis la grandiosa Fervenza de Brañas