Aprovechando que el tiempo ha dado una pequeña tregua nos desplazamos hasta el concello de Toques (provincia de A Coruña) para conocer una cascada que llevaba tiempo apuntada en mi lista. Se trata de la Fervenza de Brañas, un salto de 40 metros de altura nutrido por el río Furelos que, con todo lo que ha llovido, lucía espectacular.
No es una cascada muy concurrida por lo que si buscáis paz este es vuestro lugar.
Junto a la cascada hay un antiguo molino a medio restaurar conocido como «Muíño da Fervenza» famoso hasta que se dejó de utilizar a mediados del S.XX por elaborar una molienda muy fina. ¡En época de grandes lluvias el agua llega a sobrepasar su tejado!
Cómo llegar
Aunque la ruta más rápida es coger la AP-9 hasta Santiago de Compostela yo siempre escojo carreteras nacionales porque me encanta conocer pueblitos y además nos evitamos lo caros que están los peajes en Galicia. En nuestra excursión pasamos por Lalín, paramos a comer un pulpo en Arzúa y atravesamos Melide en dirección a Toques.
Una vez llegamos al ayuntamiento de Toques siguiendo la carretera DP-4604 en dirección Sobrado-Friol ya encontraréis la señalización «As Fervenzas».
Para los tope senderistas podéis dejar el coche en el Área Recreativa del río Furelos desde donde parte un sendero que, bordeando el río, os pondrá en la cascada en 20 minutos. Y para los más rezagados se puede acceder perfectamente con el coche hasta las mismas faldas por una pista forestal que está bastante bien acondicionada (tranquilos que no dejaréis la rueda atrás😁).
Cómo dato curioso, la cascada se encuentra dentro de una zona de especial conservación que comprende toda la Sierra de Careón y que pertenece a la Red Natura 2000 protegiendo así los espacios naturales más importantes de Europa. Para que veáis las maravillas que esconde la España rural🥰
Y ya que estáis por la zona, a tan solo 25 minutos no podéis perderos la Fervenza das Hortas