Nunca cruzar a otro país fue algo tan sencillo. Basta con caminar medio metro sobre un original puente de madera y en medio segundo estaremos en España o en Portugal.

Esto es lo que pasa en la aldea de Cevide, en el municipio de Melgaço, conocida por ser el punto más septentrional de Portugal y por ello se dice que «aquí comienza Portugal».

Con la intención de atraer el turismo y dar a conocer un poco más sobre su historia crearon unas pasarelas de madera de poco más de 1 km tomando como referencia el Marco N°1 de Portugal que indica la zona exacta del lugar más septentrional del país.

Las pasarelas descienden desde la aldea hasta el río rodeadas de frondosa vegetación, finiquitando en un pequeño puente de madera que cruza el río Troncoso para trasladarte a otro país.

Y esto no es todo. Paso fronterizo, oculto por la vegetación y fácil acceso ¿que creéis que podía pasar aquí? ¡Exacto! esto fue un trilho de contrabando en una época en la que las fronteras estaban cerradas. De esa época todavía se conserva la antigua casa del guardia reconvertida ahora en turismo rural bajo el nombre de Casa Posto da Guarda Fiscal

Aunque las pasarelas son cortitas se puede continuar la ruta por la parte gallega bordeando el río Troncoso.

El río Troncoso desemboca en el río Miño que, justo en esa zona, cuenta con una pequeña playa fluvial, la playa de Padrenda situada en la parte ourensana. Ideal para un chapuzón o la parada picnic 🧺.

Dicen los vecinos que desde aquí se puede escuchar el canto de los gallos de tres provincias: Pontevedra, Ourense y Minho. ¡Habrá que comprobarlo!